La evolución del tejido
Era llamado telar de cintura o telar de espalda, este era la herramienta principal de los otavaleños para realizar muchas de sus prendas de vestir. Este telar tuvo una gran influencia en la época de la colonia, ya que se introdujo el telar español. Pero desde muchísimos años atrás en Otavalo se ha realizado maravillas tejidas en telar.
Las artesanías otavaleñas son conocidas alrededor de todo el mundo por su riqueza histórica y cultural. Muchos años atrás los indígenas se dedicaban a cultivar la tierra y elaborar su vestimenta y esteras que las utilizaban para poner en el piso de sus casas.
Entre las principales artesanías se encuentran las fajas, bayetas, cobijas, lienzos, ponchos, y esteras. Estas eran vendidas o intercambiadas por otros productos. Entre estas artesanías el telar es una herramienta muy importante ya que con este se realizan los productos a base de lana de borrego.
El telar que utilizaban los otavaleños desde mucho antes de la colonia era el telar de cintura o de espalda. Este es portátil y consiste en dos vigas de madera donde se tiende la urdimbre (hilos paralelos longitudinales), la biga superior se conecta a cualquier base firma mientras que la inferior por medio de una faja se coloca en la cintura del tejedor.
Con este realizaban mucha de sus vestimentas como fajas; que son utilizadas por las mujeres para sostener el anaco, una especia de fajas más delgadas la utilizan para envolver su pelo, y ponchos. Este telar es realizado por ellos mismos. Con este el tamaño máximo de la prenda era de 91 centímetros por lo que para los ponchos se debía hacer dos franjas y después unirlas dejando un hueco por la mitad.
Con la colonia se introdujo el telar español o telar de pedal, que antes era fabricado por los mismos campesinos pero ahora son fabricados por carpinteros. Con este el proceso de fabricación era mucho más corto, los artesanos realizan el producto y lo comercializan. Al hacerlo se comenzaron a fabricar otro tipo de cosa como cobijas, bayetas que son utilizadas para el cuidado de los bebes, los tapices, que ahora son muy famosos, no son productos tradicionales de la cultura otavaleña, estos son adquiridos por turistas, quienes los utilizan para la decoración.
Por medio de los tapices los indígenas representan parte representativas de su cultura como su gente (las chismosas), paisajes, fiestas y animales. Además utilizan colores vivos que expresan su riqueza cultural, aunque los colores más representativos de los indígenas de Otavalo son el azul, blanco, negro, gris.
Como en la mayor parte de culturas indígenas el conocimiento de la realización de sus artesanías se ha transmitido de padres a hijos a través de los años.
Los artesanos se especializaron dividiendo el trabajo, cada familia o grupo se dedicaba a la elaboración de un tipo de mercancía. A la vez dentro de cada familia se dividen las tareas que realizará cada miembro de la misma. Los niños se dedican a quitar las impurezas de la lana, las mujeres con la ayuda de sus hijos lavan y limpian la lana, después los hombres hilan y preparan el urdido. El tejido es realizado por los hombres primero por ser una tradición y segundo porque es un trabajo duro. Después de sacar el telar las mujeres y niñas los colocan tiros y flecos.
Hasta ahora en algunos lugares todavía se utiliza el tradicional telar de cintura para la realización de algunos productos. Aunque a los comerciantes les interesa más utilizar el telar de pedal ya que consume mucho menos tiempo. Y el últimos años han creado máquinas que hacen el mismo trabajo de telar español pero en menor tiempo y sin tanto trabajo.
Era llamado telar de cintura o telar de espalda, este era la herramienta principal de los otavaleños para realizar muchas de sus prendas de vestir. Este telar tuvo una gran influencia en la época de la colonia, ya que se introdujo el telar español. Pero desde muchísimos años atrás en Otavalo se ha realizado maravillas tejidas en telar.
Las artesanías otavaleñas son conocidas alrededor de todo el mundo por su riqueza histórica y cultural. Muchos años atrás los indígenas se dedicaban a cultivar la tierra y elaborar su vestimenta y esteras que las utilizaban para poner en el piso de sus casas.
Entre las principales artesanías se encuentran las fajas, bayetas, cobijas, lienzos, ponchos, y esteras. Estas eran vendidas o intercambiadas por otros productos. Entre estas artesanías el telar es una herramienta muy importante ya que con este se realizan los productos a base de lana de borrego.
El telar que utilizaban los otavaleños desde mucho antes de la colonia era el telar de cintura o de espalda. Este es portátil y consiste en dos vigas de madera donde se tiende la urdimbre (hilos paralelos longitudinales), la biga superior se conecta a cualquier base firma mientras que la inferior por medio de una faja se coloca en la cintura del tejedor.
Con este realizaban mucha de sus vestimentas como fajas; que son utilizadas por las mujeres para sostener el anaco, una especia de fajas más delgadas la utilizan para envolver su pelo, y ponchos. Este telar es realizado por ellos mismos. Con este el tamaño máximo de la prenda era de 91 centímetros por lo que para los ponchos se debía hacer dos franjas y después unirlas dejando un hueco por la mitad.
Con la colonia se introdujo el telar español o telar de pedal, que antes era fabricado por los mismos campesinos pero ahora son fabricados por carpinteros. Con este el proceso de fabricación era mucho más corto, los artesanos realizan el producto y lo comercializan. Al hacerlo se comenzaron a fabricar otro tipo de cosa como cobijas, bayetas que son utilizadas para el cuidado de los bebes, los tapices, que ahora son muy famosos, no son productos tradicionales de la cultura otavaleña, estos son adquiridos por turistas, quienes los utilizan para la decoración.
Por medio de los tapices los indígenas representan parte representativas de su cultura como su gente (las chismosas), paisajes, fiestas y animales. Además utilizan colores vivos que expresan su riqueza cultural, aunque los colores más representativos de los indígenas de Otavalo son el azul, blanco, negro, gris.
Como en la mayor parte de culturas indígenas el conocimiento de la realización de sus artesanías se ha transmitido de padres a hijos a través de los años.
Los artesanos se especializaron dividiendo el trabajo, cada familia o grupo se dedicaba a la elaboración de un tipo de mercancía. A la vez dentro de cada familia se dividen las tareas que realizará cada miembro de la misma. Los niños se dedican a quitar las impurezas de la lana, las mujeres con la ayuda de sus hijos lavan y limpian la lana, después los hombres hilan y preparan el urdido. El tejido es realizado por los hombres primero por ser una tradición y segundo porque es un trabajo duro. Después de sacar el telar las mujeres y niñas los colocan tiros y flecos.
Hasta ahora en algunos lugares todavía se utiliza el tradicional telar de cintura para la realización de algunos productos. Aunque a los comerciantes les interesa más utilizar el telar de pedal ya que consume mucho menos tiempo. Y el últimos años han creado máquinas que hacen el mismo trabajo de telar español pero en menor tiempo y sin tanto trabajo.